En la planta superior, la exposición Del Art Nouveau al siglo XXI muestra piezas de la Colección de Arte Serra, un conjunto creciente que se ha ido enriqueciendo a lo largo de los años gracias a generosas donaciones de coleccionistas privados y artistas, todas ellas gestionadas por la Fundación Tren de l’Art.

El sótano, que en su día fue una serie de almacenes tradicionales conocidos como botigues, conserva elementos de la casa original, como una antigua estufa, un depósito de aceite de oliva, un pozo y un antiguo comedor para el personal, ahora reconvertido en galería para exposiciones temporales. En una sección dedicada también se exponen obras de Juli Ramis, que ilustran su evolución artística desde sus primeras exploraciones hasta el cubismo y las composiciones abstractas.

En el exterior, el jardín del museo ofrece un entorno sereno donde los visitantes pueden admirar la fachada trasera del edificio y una colección de esculturas. Can Prunera abrió oficialmente sus puertas el 24 de agosto de 2009, coincidiendo con la festividad de San Bartolomé, patrón de Sóller. Desde entonces, se ha convertido en una visita cultural obligada, que atrae tanto a turistas como a locales deseosos de conectar con el patrimonio artístico y arquitectónico de la isla. La meticulosa restauración del edificio entre 2006 y 2009 le ha valido a Can Prunera un amplio reconocimiento, consolidando su estatus como un hito clave del movimiento modernista de Mallorca.